COMO VENECIA SIN MÁS.

Es curioso cerrar los ojos y caer en tus deseos o miedos más profundos.

Son sueños pequeños,insignificantes, que pueden prevenir como te va a ir el día esperado, o que simplemente los pasas por alto, o directamente los olvidas sin recordarlos.

Esa forma de caer rendido, en una profunda fantasía, en un traumático abismo, es aun más curiosa que lo que aun queda por llegar. Tanto es el cansancio, que nos rendimos ante todas las posibles posibilidades. Una parte de nosotros se apodera,y nos lleva a otro mundo en el cual, solo existen 2 sentidos. ¿Cuándo sabemos que vamos a escaparnos? ¿Qué momento exacto es ese,en el qué dejamos de pensar y vivimos sin querer cosas sin sentido? ¿ La insondable lasitud?

¡Qué poco cuesta construir castillos en el aire y qué cara es su destrucción! - François Mauriac